sábado, septiembre 25, 2010

Toc...
toc... toc...

Destrás de la puerta el corazón golpetea, me amarro la boca con un suspiro, de esos de los que casi no me acordaba.

El ruido sigue insistiendo; pequeños golpes huecos, como si fuese en la pared, en lo oscuro enmudece una habitación. La puerta rechina, rechina mucho; por abandono, porque le duele... yo que sé.

Hindue blues - Kevin Johansen