Las musas se descaminan todo el tiempo. Separan las piernas con facilidad, penetradas de ilusiones vagas, se pierden entre los sueños, se tatuan el vientre, no usan ropa interior y usan pelucas baratas. Se pierden en los bares donde las encuentras orgasmeando la psique de algún artista. Temen amarlas, porque son efímeras, son amantes, impredecibles. Se roban sus cuentos, sus historias, algunas terminan perdidas entre recetas de cocina, de pie, de piel, o adornando la pared de alguna estancia. Las musas se desnudan solas, hacen el amor y se van, como los marineros., después se extravían en el océano mental de algún creador de cosas bellas, quedando anunciada su presencia para la posteridad en el escaparate de tu memoria.
Con un homosexual, con un homosexual terminé bailando ayer.
Happy birthday to me...
Con un homosexual, con un homosexual terminé bailando ayer.
Happy birthday to me...
2 comentarios:
- Es q no la encuentro, es como si no me hablara por mi nombre -
Al lado de la barra, otro más pedo q dólido le contesta.
-¿Y eso importa? -
El más dólido q pedo lo ve, exigiendo su derecho a rumiar.
- No están sus ojos, es como si me hiciera el amor viendo a otro. -
- ¡Bah! hechése la otra...
Yo aquí la veía antes, hasta q todo mundo le empezó a meter mano. -
El más dólido q pedo le replica.
- ¿Y eso importa? -
Un silencio entendido los une. Es mejor pedir más tequila. Hasta q un tercero, más abogado q compadre, pregunta.
¿Q es eso q se oye? -
Los otros dos solo sonríen y beben más tequila. El más pedo q dólido le explica.
- Es aquel cabrón de la esquina. No habla nunca, solo se la pasa con el corazón aullando hasta q amanece. -
- Pero si el corazón no tiene voz -
- ¡Ah pero como duele!
Después de las risas, los tres brindan en otro silencio entendido. A pesar de q no hay musas, la barra transpira, parecieran feremonas olvidadas a propósito por esa obstinación de las mujeres por embriagar.
A los parroquianos les empieza a llegar el jalón ese, q corre por toda la espalda, previo a la búsqueda.
Antes de q cualquiera hiciera su petición por la presencia femenina, un cuarto cabrón, más coco q entendido, pregunta a gritos
-¿On tan las viejas -
Las caras de hastío-lameme-los-huevos de los tres es explícita. No conforme, el más coco q entendido, insiste,
¿Aquí es las Musas o no? Afuera dice q se abren de piernas con facilidad, penetradas por no se q vergas. -
Penetradas de ilusiones vagas - Le replica el más dólido q pedo.
Inquieto, el más coco q entendido no se haya en la barra y antes de pedir unas viejas por teléfono y con los clasificados de sexo barato en la mano, algo lo inquieta aún más.
- ¿Q es eso q se oye?
Antes de q alguien le explique, las luces del bar se prenden, todas. (Si fueran mejor besos ¿verdad? ) piensa el más dólido q pedo, volteando al techo.
Afuera y sin la caminera, el más pedo q dólido se queja.
- Estas cantinas de hoy, no dan chanza a q los sentimientos hagan su digestión. Como antes, salir y q el sol se encargará de esfumar cualquier pena. Llegaba uno enterito, no q así.. -
El más abogado q compadre lo observa y nota q al más pedo q dólido, la evilla le roba más panza q pene, y ante la autoridad de la castidad metálica, le dispara a quemarropa.
- No se preocupe, hay huecos en los q no caben las musas -
El más pedo q dólido, lo ve sacado de onda.
- A q mi compadre, se me hace q usted era el homosexual ese, con q termino bailando mi reina la otra noche -
En el último silencio entendido de la noche, los compadres deciden de q es hora de tapar cada hueco en un arranque de autosuficiencia masculina.
Antes de q todos se marchen, las puertas de las Musas se abren para escupir al último cabrón.
Ahí, parado, el de la esquina, detiene los aullidos de su corazón. Todos lo notan. Uno dice.
- Shh... parece q va a hablar -
Con una sonrisa ganosa, los evade y caminando en dirección opuesta, solo susurra.
- Gracias Bella... -
este es mi favorito Musa! con buena razon lo pusiste en la pagina de inicio =)
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